La Junta destina 600.000 euros a 18 escuelas de verano que benefician a casi un millar de menores en Sevilla.
La Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, a través de la delegación territorial en Sevilla, ha subvencionado con 600.000 euros la puesta en marcha de 18 escuelas de verano en la provincia de Sevilla en las que participarán, aproximadamente, unos 968 menores de zonas desfavorecidas.
Este programa se desarrolla en la capital, y en las localidades de Pilas, Lebrija, San Juan de Aznalfarache, Dos Hermanas, Alcalá de Guadaíra, Utrera y las Cabezas de San Juan, según detalla la Junta en un comunicado.
La delegada territorial de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de Sevilla, María Luisa Cava, ha visitado este lunes, junto al concejal de Desarrollo Económico e Industria y concejal de Educación y Formación Profesional del Ayuntamiento de Alcalá, Pablo Chain, la escuela de verano ALA, coordinada por la Asociación Albores y que ha contado con una subvención de 79.705 euros.
La Junta destina 600.000 euros a 18 escuelas de verano de Sevilla
La citada escuela de verano está dirigida principalmente a alumnos de secundaria de entre 12 y 16 años. Las escuelas de verano, que se desarrollan durante los meses de julio y agosto, buscan fomentar los hábitos saludables, la educación en valores, además de las habilidades sociales, mediante actividades de refuerzo educativo y de ocio y tiempo libre.
María Luisa Cava ha recordado al respecto que las escuelas de verano, a través de las entidades que las gestionan, cumplen una doble labor: «llevan a cabo acciones socioeducativas y ofrecen un servicio de comedor que garantiza las necesidades básicas alimentarias del colectivo, mediante la distribución de tres comidas diarias».
Asimismo, la delegada territorial ha señalado que, además, permiten reforzar la atención de la infancia y adolescencia más vulnerable de la provincia. «Los niños disfrutan, aprenden y lo más importante, continúan educándose en valores, como el compañerismo, respeto y el trabajo», ha proseguido, al tiempo que ha incidido también en el importante papel de este programa para favorecer la conciliación de las familias.
Junto al servicio diario de comedor, ofrecen un amplio abanico de actividades formativas, culturales y lúdicas encaminadas a reforzar también el proceso educativo de niños con necesidades especiales. Igualmente, fomenta alternativas para el uso adecuado del tiempo libre vacacional y se trabajan valores como la solidaridad, la amistad, la responsabilidad o el respeto. Este programa va dirigido a menores cuyas familias tienen dificultades o se encuentran en situaciones de riesgo o de exclusión social.