Las obras de montaje de la vía para la llegada del metro de Málaga al centro histórico ha finalizado este viernes con la última soldadura de carril de vía, que se ha llevado a cabo en presencia del consejero de la Presidencia, Administraciones Públicas e Interior, Elías Bendodo, la consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Marifrán Carazo, y el alcalde, Francisco de la Torre.
Las obras correspondientes a este contrato de suministro y montaje de la superestructura de vía, cuyo presupuesto asciende a 5,5 millones de euros, han consistido en el tendido de la vía de los tramos de infraestructura Renfe- Guadalmedina y Guadalmedina-Atarazanas, que posibilitará la explotación y circulación de las unidades de tren del metro de Málaga hasta la Alameda Principal.
Carazo ha destacado que las obras del metro de Málaga, tal y como se conciben convencionalmente, «dejan paso ya, de forma definitiva, a las actividades más ligadas a la futura explotación comercial, de un carácter más tecnológico».
La obra de infraestructura del tramo Guadalmedina-Atarazanas (entre el tablero norte del Puente de Tetuán y la Alameda Principal) se concluyeron en junio de 2020, y la obra de terminación entre Renfe y Guadalmedina están concluidas, con la excepción de la actividad arqueológica de puesta en valor que se prolonga hasta enero de 2022.
Estos hitos son, ha explicado la consejera, una «muestra del cambio de ritmo» que ha imprimido el Gobierno andaluz desde su llegada hace tres años, indicando que desde enero de 2019 y hasta final de año se van a emplear 67 millones de euros para la culminación de los trabajos.
«Se ha triplicado la inversión con respecto a lo realizado en la pasada legislatura», ha remarcado la titular de Fomento, que además ha destacado la agilidad en el pago de certificaciones de obras, que se encuentra actualmente en un periodo medio de 9,5 días que «ofrece garantías a las empresas contratistas».
Carazo ha anunciado que, de no surgir imponderables con el suministro de materiales, «tanto las instalaciones y sistemas, como todos los acabados y revestimientos de las estaciones Guadalmedina y Atarazanas, estarán concluidas el próximo mes de febrero, dándose así por terminada la ejecución de las dos nuevas estaciones con todos sus elementos.
Por su parte, el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior, Elías Bendodo, ha resaltado que el Gobierno andaluz «sigue avanzando con paso firme en su compromiso» para que el metro llegue al centro de Málaga en 2022.
«En una sola legislatura la llegada del metro al centro de Málaga va a ser una realidad», ha afirmado, al mismo tiempo que ha explicado que la no aprobación del presupuesto de 2022 por el rechazo del PSOE y Vox «no va a afectar en la culminación de las obras».
Sí repercute, ha añadido Bendodo, en el dinero previsto para el proyecto de prolongación del Metro de Málaga hasta el Hospital Civil, aunque «la Consejería de Fomento ya está trabajando para buscar esa financiación y que no afecte a su redacción».
El montaje de las vías se ha desarrollado en un recorrido en el que se localizan las estaciones de Guadalmedina (localizada en la Plaza Poeta Manuel Alcántara, junto a la Avenida de Andalucía) y Atarazanas (ubicada en la intersección de la Alameda Principal y Puerta del Mar).
A pesar de que se trata de un trazado de un kilómetro, se han tendido un total de cuatro kilómetros de carriles de vía, ya que en este tramo coinciden las Líneas 1 y 2, razón por lo que la infraestructura dispone de dos niveles de andenes (andenes -1 y -2), ambos de plataforma doble, hasta justo antes del cauce del Río Guadalmedina, donde ya solo se dispone de un nivel subterráneo de vestíbulo y un único nivel de túnel y andén.
Se han colocado, además, 16 aparatos de vía que dan una idea de la cantidad de movimientos de trenes que pueden permitirse para la explotación comercial. Entre los aparatos de vía más singulares, destacan los aparatos en curva que dan acceso a la futura prolongación del metro al Hospital Civil y que permitirán (mientras tanto) la llegada de las dos líneas a Atarazanas.
También han destacado los aparatos de vía en forma de cruz (o bretelles) en el andén -1 y los dos escapes situados en el nivel -2 que facilitan estos movimientos.
FIN DEL TENDIDO DE CATENARIA
Por su parte, los trabajos de instalaciones y arquitectura de estaciones cobrarán a partir de ahora un mayor rendimiento, una vez despejados el túnel y las estaciones de todos los trabajos anteriores de infraestructura y urbanización, así como de superestructura de vía.
De hecho, está previsto que antes de que finalice el presente año concluya también la instalación de la catenaria en todo el nuevo trazado, «cumpliendo de nuevo el cronograma de las obras, tal y como viene sucediendo desde el inicio de la presente legislatura», ha afirmado la consejera.
Actualmente, trabajan en las obras del metro de Málaga, sumando el personal de todos los contratistas, consultores y direcciones de obra, un total de 243 trabajadores, si bien el 55 por ciento de los trabajadores está adscrito al contrato de instalaciones y arquitectura de estaciones.
Las obras del metro y su explotación comercial son promovidas por la Consejería de Fomento y gestionadas por la Agencia de Obra Pública.
Una vez finalizadas todas las instalaciones (subestación de tracción, comunicaciones y sistemas de información al viajero, máquinas expendedoras y líneas de validación, sistemas de bombeo, protección contra incendios y sistemas de ventilación, entre otros), así como la arquitectura de estaciones, a partir del mes de febrero, se iniciará una fase de pruebas de todos estos equipamientos y de su integración con el Puesto de Control Central.
Igualmente, para la primavera del próximo año se iniciarán también las pruebas dinámicas con trenes, en paralelo a los avances de implantación de la señalización ferroviaria, cuyo proyecto está prácticamente concluido.
Entre las autoridades que también han estado presente en el acto cabe destacar al viceconsejero de Fomento, Mario Muñoz-Atanet; la delegada del Gobierno de la Junta, Patricia Navarro; la delegada territorial de Fomento, Carmen Casero, y el director gerente de la Agencia de Obra Pública, Julio J. Caballero.
