Hace dos meses miraban al horizonte desde sus casas con algo de miedo e incomprensión. No podían permitir que su entorno se convirtiera en un gran vertedero, teniendo en cuenta además que la mayoría de vecinos tienen patologías y una avanzada edad. Los vecinos de la Junta de los Caminos ya expresaron a 101 Televisión el rechazo absoluto a la construcción de un centro ambiental de reciclaje de más de 400.000 metros cuadrados que estaba proyectado en la parte alta del distrito.
Una preocupación que ha llegado a su fin, ya que el Ayuntamiento de Málaga ha tumbado dicho proyecto, pero está trabajando en proponer a la empresa Verosa un nuevo emplazamiento que cumpla los requisitos establecidos por el planeamiento urbanístico de la ciudad y cuya ubicación tenga consenso por parte de los vecinos. «¡Lo hemos conseguido!», reconocen los vecinos cada vez que se les pregunta por cómo se sienten ahora que han logrado su objetivo.
Incumplimiento del PGOU
Desde Urbanismo han rechazado este proyecto por el incumplimiento del PGOU, sobre todo, en lo referente a suelos no urbanizables y sensibles desde el punto de vista paisajístico. En este sentido, desde el Consistorio alegan que en cuanto a dicho cumplimiento «se acepta la previsión y necesidad de implantarlo en suelo rústico, ya que las dimensiones necesarias para llevarlo a cabo y las condiciones diarias de la actividad lo hacen prácticamente incompatible con los usos urbanos, pero el proyecto resulta incompatible con la ordenanza aplicable a este tipo de iniciativas desde el punto de vista paisajístico».
Todo ello, teniendo en cuenta que la propuesta recoge la necesidad de realizar movimientos de tierra importantes y la normativa prohíbe específicamente los desmontes y terraplenes de más de tres metros. Asimismo, concretan que no se ajusta a la normativa concreta de suelo no urbanizable del PGOU donde se plantea la iniciativa, ya que el Plan enuncia la limitación de usos en zonas con pendientes superiores al 30% en zonas sensibles, desde el punto de vista paisajístico, como es el caso, por lo que el proyecto se considera «inviable».
No al vertedero
Por otro lado, se considera que la instalación de este tipo de proyecto en esta área que conllevaría la alteración sistemática y extensiva del terreno, hecho que es incompatible al contemplarse su localización en un área que ocupa gran parte de la zona arqueológica ‘Cerro de la Peluca’ catalogada como BIC. Cabe destacar que ya en el pleno del mes de julio se aprobó una moción a instancias del Grupo Popular en la que se acordó de forma literal “no apoyar ni iniciar tramitación administrativa en relación al ‘Complejo Ambiental Málaga Norte’ en tanto no exista consenso vecinal en torno al mismo e insta a la empresa privada que lo promueve a reunirse con los vecinos e informarles detalladamente acerca del mismo a la vez que lamenta la desinformación vertida en los últimos días sobre este asunto con el fin no tanto de defender los intereses de los vecinos sino de erosionar al equipo de Gobierno
municipal y hacer causa política de esto.”
El gran centro ambiental de índole privada, denominado ‘Complejo Ambiental Málaga Norte’, estaba planteado para ir ubicado a dos kilómetros de la Junta de los Caminos, cuya distancia fue establecida por la empresa con el objetivo de que no cause molestias a los ciudadanos. El proyecto de cinco millones de euros de inversión e impulsado por la empresa Verosa, no era solo un vertedero como lo definen los vecinos, sino un complejo medioambiental enfocado en el reciclaje y valorización de residuos relacionados con la construcción, de materiales no peligrosos. Por su parte, el vertedero en sí iba a ocupar una séptima parte del total del complejo proyectado a dos kilómetros de la Junta de los Caminos.
