Agentes de la Policía Nacional, gracias a la colaboración internacional con las autoridades peruanas, han recuperado en Málaga un documento manuscrito datado en 1563, perteneciente al patrimonio cultural y archivístico del país andino. Tras su recuperación, ha sido entregado a la Embajada de Perú.
Las investigaciones comenzaron a finales del pasado mes de enero, cuando se recibió un requerimiento de Interpol en el que se comunicaba la venta del documento notarial en una plataforma de Internet. Con esta información, se iniciaron las gestiones para identificar al vendedor y proceder a su recuperación.
Inicialmente, se comprobó el enlace donde se anunciaba el manuscrito y se identificó al vendedor, correspondiéndose con una librería malagueña que ofertaba la «carta de otorgamiento de una escritura a Diego de Aguilar en las tierras del Perú de 1563», por un importe de 300 euros.
Al mismo tiempo, se estudió el informe aportado por el Ministerio de Cultura peruano, en el que de forma exhaustiva se analizaba el manuscrito puesto a la venta, cuyas dos páginas formaban parte de un mismo conjunto custodiado en el Archivo Regional de Arequipa y que habrían sido arrancadas para facilitar su tráfico ilícito, dificultando por un lado su detección y, por otro, aumentando el valor económico de lo expoliado al pretender su venta de forma individual, contextualizando los expolios más recientes entre los años 2006-2008.
En diferentes incautaciones habrían conseguido recuperar manuscritos inmediatamente anteriores o posteriores a los investigados, por lo que la venta por separado de estas escrituras implica la mutilación y dispersión de su unidad original, atentando contra la preservación de su patrimonio documental.
Penalmente, el delito se encontraría prescrito. Por otro lado, su actual y legítimo poseedor, propietario de una librería malagueña, mostró desde un primer momento su disposición a aportar todos los documentos relativos a su compra y a entregar voluntariamente los manuscritos para que regresaran a su país de origen al entender que debían volver al contexto cultural del que fueron arrebatados. El pasado 15 de marzo, los agentes entregaron el documento a la Embajada de Perú en España.