El Ministerio del Interior impulsará una reforma legal para bajar la tasa de alcohol en sangre hasta 0,2 gramos por litro para todos los conductores y hasta 0,10 miligramos de aire espirado, al entender que la «sociedad española está madura» para aceptar este cambio y reducir aún más la siniestralidad en las carreteras.
El anuncio lo ha adelantado este jueves el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Fuentes del Ministerio del Interior han explicado que la intención es que, asumiendo la propuesta de la Dirección General de Tráfico (DGT), se modifique el artículo 20 del Reglamento General de Circulación.
De aprobarse la medida, la tasa máxima permitida en España pasaría de 0,5 gramos de alcohol por litro en sangre a 0,2, mientras que de aire espirado se rebajaría de 0,25 miligramos de alcohol por litro a 0,10.
PROTECCIÓN DE VULNERABLES
En junio ya se planteó la medida de la rebaja, pero para conductores noveles y profesionales. Las citadas fuentes oficiales de Interior apuntan que la apuesta es extenderlo a todos los conductores mediante el cambio del real decreto para «mejorar la protección a los usuarios vulnerables de la carretera» como motociclistas, ciclistas y peatones.
En un desayuno informativo en Madrid, Grande-Marlaska ha señalado que Interior lo que hace es atender a la petición de las asociaciones afectadas por la «violencia vial», que ha dejado 241 fallecidos en el balance de este pasado verano. «En más de la mitad de los siniestros aparece alcohol o drogas como determinante», ha subrayado para justificar la medida.
Por este motivo, se ha mostrado partidario de «abordar el debate» que incluye tanto la reducción de las tasas de alcohol como los cursos voluntarios para recuperar puntos del carné.
COMPARACIÓN CON PAÍSES DE LA UE
Grande-Marlaska ha hecho un balance de la reducción paulatina de las muertes en carretera desde que se impulsó el carné por puntos, con un nivel actual de 36 fallecidos por millón de habitantes frente a la media de la Unión Europea fijada en 47 muertos. El reto ahora, ha dicho, es equiparnos a países como Suecia, Dinamarca y Alemania.
Para ello, el Observatorio Nacional de Seguridad Vial está estudiando y valorando esta propuesta, que está sometiendo a contraste con diversas experiencias internacionales, según las citadas fuentes.
Dentro de la Unión Europea, ya hay tres países que han fijado la tasa máxima de alcohol en sangre en 0,2 gramos por litro: Suecia, Polonia y Estonia –Noruega, sin formar parte de la UE, también es un referente en este sentido–. Además, hay otros cuatro países que ya han fijado una tasa 0,0 en sangre: Eslovaquia, Hungría, República Checa y Rumania.
El resto de países europeos, incluida España, Francia o Alemania, tienen una tasa máxima permitida en sangre de 0,5 gramos para los conductores en general –existen diferencias para los noveles y profesionales–, a excepción de Lituania que la fija en 0,4.