La actualización de datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) sobre el número de accidentes mortales en lo que va de 2024 señala que en la provincia de Málaga ha habido 28 siniestros en los que se han perdido vidas humanas. En total, son cinco más de los que había el año pasado por estas fechas cuando el registro era de 23 colisiones con trágicas consecuencias.
Así, a dos meses para que finalice el año el número de víctimas mortales en la carreteras malagueñas es de 33 mientras que en 2023 a fecha de noviembre eran 29 los decesos por accidentes. Es decir, han muerto cuatro personas más en accidentes de tráfico, según el recuento de la DGT.
Curiosamente, la tendencia nacional es a la inversa. La Dirección General de Tráfico detalla que la cifra total de siniestros mortales en los diez primeros meses de 2024 es de 888, 13 menos que en el mismo tramo de 2023 cuando eran 901. Eso sí, el número de fallecidos por siniestros en vías interurbanas es muy similar: 982 muertos en la carretera había a fecha de 13 de noviembre de 2023 y el número de este ejercicio es de 983.
Recomendaciones ante un accidente vial
La DGT tiene a disposición de toda la ciudadanía un protocolo de actuación para cuando ocurren emergencias en las vías. El ente estatal advierte a los conductores que los minutos posteriores a una colisión o incidente vial son cruciales para las tareas de socorro. Por ello, la persona que se encuentra ante una situación compleja no puede permitirse perder los nervios o actuar de forma aturullada.
«Es muy importante estar preparado y saber cómo actuar en el caso de verte involucrado o eres testigo de un accidente de tráfico», recalca la Dirección General de Tráfico que con las siglas PAS (Proteger, Alertar, Socorrer) aúna todo un protocolo de atención precoz y efectiva para salvar vidas o reducir posibles daños en las salud.
El principal objetivo es que los afectados sean auxiliados por un servicio de emergencias que aporte los efectivos necesarios en el lugar del accidente (bomberos, policías, sanitarios…) para mejorar y recortar los tiempos de atención y su calidad.
«La conducta PAS está reconocida y establecida a nivel internacional para cualquier tipo de actuación inicial ante una emergencia. Se define como las primeras actuaciones que tendrán como objetivo primero la protección en el escenario, posteriormente alertar a los servicios de emergencia y, solo tras esto y tenemos los conocimientos adecuados, centraremos nuestra atención en socorrer a los heridos», concluye la DGT.