Un frente atlántico entrará por el noroeste este vienes y condicionará el tiempo en la Península y Baleares el fin de semana y otro frente más dejará lluvias el lunes y martes para dar paso a partir del miércoles a la estabilidad atmosférica y a un ascenso de las temperaturas, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, ha explicado que estos sistemas frontales están asociados a la borrasca Evelyn, que ha sido nombrada por el servicio meteorológico portugués, y que dejará lluvias en buena parte de España entre el lunes y el martes, mientras que el resto de la semana continuará con pocas lluvias.
Antes de eso, este fin de semana prevé que cielos nubosos o precipitaciones en Galicia y Cantábrico, localmente persistentes en el oeste de Galicia, así como, más débiles, en otras zonas del tercio noroeste peninsular y Pirineos, con cotas de nieve superiores a 1200/1400 metros.
A partir de la segunda mitad del sábado tenderá a disminuir la nubosidad y quedarán en general cielos poco nubosos. De nuevo durante la tarde del domingo tenderá a aumentar la nubosidad y las precipitaciones volverán al entorno de Galicia y las más abundantes se esperan en las Rías Bajas al final del día.
Una vez que pase el frente, las temperaturas diurnas subirán de forma acusada en las vertientes atlántica y cantábrica y descenderán en el Mediterráneo. Las mínimas también subirán en la mayor parte del país y las heladas quedarán restringidas a zonas altas.
En el sur y suroeste de los litorales y zonas altas de Galicia y el Cantábrico soplarán intervalos de viento fuerte del sur y rolará a levante en el Estrecho y a norte en Ampurdán.
En Canarias, el fin de semana estará marcado por los intervalos nubosos en el norte de las islas y poco nubosos en el sur y habrá viento del noreste y norte rolando el domingo a noroeste.
La próxima semana, del 11 al 17 de abril empezará con un frente atlántico activo que afectará a la Península de oeste a este y dejará cielos nubosos y precipitaciones casi generalizadas.
El lunes serán más intensas en zonas del tercio occidental peninsular y podrán ser localmente persistentes en el entorno de Rías Bajas, oeste de Castilla y León y del sistema Central, y el martes en el oeste de Galicia, norte de Aragón y Cataluña, alto Ebro y sistema Ibérico.
A partir del miércoles se espera que las precipitaciones vayan remitiendo en intensidad y extensión y el jueves comenzará un periodo de estabilidad en el que predominará una situación anticiclónica y cielos poco nubosos o con nubes altas.
En Canarias predominarán los vientos alisios y puede llover en el norte de las islas montañosas, algo más probables el lunes.
En cuanto a las temperaturas, al principio de la semana experimentarán un descenso acusado en la vertiente atlántica, aunque en el Mediterráneo predominarán los ascensos y a partir del miércoles tenderán a ascender de manera generalizada. En Pirineos habrá heladas débiles.
Respecto al viento, la AEMET informa de que empezarán la semana soplando de componente sur, con rachas muy fuertes en montañas del norte, y con poniente en el Estrecho. Desde el miércoles los vientos soplarán del oeste y norte en la Península y Baleares y rolarán a Levante en el Estrecho.
El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, ha explicado que las lluvias de marzo y de la primera semana de abril han aliviado pero no han revertido la situación de sequía meteorológica del final del invierno.
Del Campo admite que no puede afirmar por el momento si en abril lloverá más o menos de lo normal porque la incertidumbre en el pronóstico es grande en primavera. No obstante, ha adelantado que en el trimestre de abril, mayo y junio parece que el escenario más probable es el de lluvias por debajo de lo normal en buena parte de la mitad occidental de la Península y no se observa una tendencia clara para la vertiente mediterránea.
Por otro lado, ha indicado que el breve episodio frío de principios de abril no es desconocido sino que por el contrario es temido por los agricultores por los daños que puede ocasionar a sus cosechas, pero en este caso afirma que ha sido una entrada de aire fría muy intensa e incluso extraordinaria.
Así, en concreto los días 2 y 3 de abril batieron récord de frío y fueron lo días 2 y 3 de abril más fríos en España desde 1971. «Batieron el récord que llevaba vigente prácticamente desde el inicio de la serie histórica, concretamente desde 1952.
Del Campo ha apuntado que esta semana en numerosas estaciones de la red principal de AEMET se batieron récords de temperaturas bajas para abril, como por ejemplo en Daroca (Zaragoza), que dispone datos de más de cien años y este 4 de abril se llegó a -5,7ºC, lo que supera los -5ºC medidos en abril en 1935. «Bate un récord de 87 años de antigüedad», añade.
En las horas centrales del día también hizo mucho frío para ser abril, como por ejemplo el martes, 5 de abril que fue la primera vez que en Murcia o Córdoba no llegaron a 10ºC de máxima. En Murcia la máxima se quedó en 9,9ºC y en 9,2ºC en el caso de Córdoba. «Records muy significativos, en unas series que tienen alrededor de cuarenta años», ha valorado.
Finalmente, ha comparado este episodio frío de principios de abril con las temperaturas máximas que se van a alcanzar este domingo, 10 de abril, donde la ciudad de Córdoba podrá alcanzar 28ºC, es decir 20ºC más que los que se registraron el martes 5 de abril.
Así, prevé que la próxima semana comenzará con ambiente fresco por el paso de sistemas frontales por la borrasca Evelyn terminará probablemente con ambiente cálido y temperaturas máximas superiores a 23ºC a 25ºC en muchos puntos de la Península, sobre todo en la mitad sur.