La subida de precios está afectando a la mayoría de los productos que integran la cesta de la compra de los hogares. Pero, en especial, a los que más se consumen.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) publica cada año las ponderaciones de los productos y servicios que se incluyen en el Índice de Precios de Consumo (IPC). La ponderación es su peso específico dentro de la cesta de la compra.
Si analizamos como están evolucionando los 30 grupos de productos más importantes de la cesta de la compra, observamos que 29 han subido de precio en los 12 últimos meses. Y el restante (los juegos de azar) está igual. Es decir, tampoco ha bajado.
LO QUE MÁS SUBE Es LA CESTA DE LA COMPRA
Restaurantes, cafés y luz, donde más se gasta
De las 199 subclases de artículos que estudia el INE, la más importante es la de restaurantes, cafés y salas de baile, que concentra el 8,7% del gasto de las familias. Según el IPC de mayo, los precios en estos establecimientos han subido un 4,5% en tasa interanual.
Es un aumento notable –aunque no lo parezca dadas las cifras de inflación a las que nos estamos acostumbrando en los últimos meses–, pero muy inferior al del segundo artículo que más pesa en la cesta de la compra: la electricidad.
La factura de la luz se lleva cada año el 4,2% del presupuesto de una familia. Pero tras aumentar de precio un 30% en un año está cobrando mayor importancia dentro de la cesta de la compra.
Un hogar que se gastaba 100 euros en la factura eléctrica en mayo de 2021, ahora se deja 130 por el mismo consumo de luz.
Las gasolinas aceleran
El tercer mayor gasto que realizan los hogares es en carburantes. El 5,6% de su presupuesto se destina a gasóleo y gasolina.
Y, si se observa cómo han evolucionado los precios de ambos combustibles nos damos cuenta que, lamentablemente, completan el podio de subidas de precios, junto con la luz. El diésel se ha encarecido un 34% en un año. La gasolina, un 24%.