Los Dolores de San Juan celebra este domingo su Procesión de Minerva . La Archicofradía Sacramental de los Dolores, de la Parroquia de San Juan, celebra este domingo 9 de junio su Procesión de Minerva con el Santísimo Sacramento. Estos cultos se vienen celebrando desde 1998 en el fin de semana posterior a la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo, la ya extinta Octava del Corpus.
Previamente a la procesión, la Iglesia de San Juan acogerá, a las 19 horas, una Solemne Misa presidida por el Consiliario de la Archicofradía, p. Pablo Ruiz Lozano, superior de la Comunidad de Jesuitas del Sagrado Corazón de Málaga.
Finalizada la Eucaristía, hacia las 20 horas, será expuesto el Santísimo Sacramento y entronizado en la carroza, para comenzar la Procesión de Minerva. El itinerario será el siguiente: San Juan, Especería, Nueva, Liborio García, Mesón de Vélez, Doctor Felipe Sánchez de la Cuesta y Alarcón, Alarcón Luján, Puerta del Mar, plaza Félix Sáenz, Sagasta, plaza de Arriola (con estación ante el Convento de las Hermanas de la Cruz), Sebastián Souvirón, San Juan y a su templo, en donde se dará la bendición con el Santísimo a todos los fieles, en torno a las 21.30 horas.
Los Dolores de San Juan celebra este domingo su Procesión de Minerva
Como viene siendo costumbre, acompañará en la procesión la banda de música Maestro Eloy García de la Archicofradía de la Expiración, que desplegará un repertorio de marchas solemnes y eucarísticas, entre las que se encuentra la tradicional interpretación, a la salida del Santísimo Sacramento, del ‘Himno Pontificio’ (Charles F. Gounod, 1869).
Este año, como novedad, en el recorrido sonará la marcha ‘Lamento’, del compositor Tomás J. Ocaña, última incorporación al patrimonio musical de la Archicofradía y que fue estrenada por la banda de la Oliva de Salteras en el marco del Congreso ‘Hebdomada Sancta’, el pasado 3 de febrero.
La procesión, que en 2023 hubo de ser claustral a causa de la lluvia, hará que sea en esta edición cuando luzca en la calle por primera vez la custodia procesional ya sometida al proceso de restauración que efectuó el año pasado el joyero cordobés Manuel Valera Pérez, y que se ha completado este año con la consolidación del viril exterior.
La Archicofradía Sacramental de los Dolores es el resultado de la agregación en 1801 de la Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores –erigida en 1688, aunque con orígenes en el siglo XVI- a la Archicofradía Sacramental de la Parroquia, que fue fundada por los Reyes Católicos en 1487 mediante una bula papal otorgada por el papa Inocencio VIII. Las primeras Reglas que se conocen de esta Archicofradía Sacramental datan del año 1521.
Repertorio musical de la Procesión de Minerva
Himno Pontificio (Charles F. Gounod, 1869)
Virgen de los Dolores (Perfecto Artola, 1991)
Redención (Francisco J. Flores Matute, 2014)
Lamento (Tomás J. Ocaña 2024)
Al Santísimo Cristo del Amor (Manuel López Farfán, 1907)
Cordero de Dios (Ricardo Dorado, 1964)
Cristo del Buen Fin (Luis Lerate, 1948)
Domus Aurea (Jaime Texidor, s/f)
Dulce Nombre de Jesús (Pedro Morales, 1982)
El Corpus (Braulio Uralde, s/f)
La Divina Pastora (Camilo Pérez Monllor, 1916)
Reina del Carmelo (Germán Álvarez Beigbeder, 1923)
Santa Teresa de Jesús (Germán Álvarez Beigbeder, 1924)
Triunfal (José Blanco / Emilio Cebrián, s/f)
Sobre la custodia y su autor, José David Esteve
La custodia de San Juan es una pieza de 115 cm. de altura y 13,5 kg. de peso, y fue encargada por la Archicofradía Sacramental de los Dolores en 1941 al orfebre valenciano José David Esteve, ascendiendo su coste a 8.500 pesetas. La pieza toma inspiración de una de las custodias pertenecientes a la Colegiata de San Sebastián de Antequera, reproduciendo los esquemas estéticos del primer barroco.
La parte superior, el sol u ostensorio, alterna rayos flamígeros con rectos y se remata con una cruz. En el fuste de la custodia, a su mitad, se sitúan cuatro capillas que acogen pequeñas imágenes de la Inmaculada Concepción, San Juan Bautista, el Buen Pastor y San José. El interior de la base cuenta con diversas inscripciones que revelan desde la relación de donantes hasta las autoridades eclesiásticas de la época, así como la autoría de la pieza.
Pero, sin duda, el elemento de mayor valor es el doble viril que encierra la Sagrada Forma, el interior en oro, y el exterior profusamente decorado con piedras preciosas y alhajas, fruto de sucesivas donaciones de fieles.
El orfebre valenciano José David Esteve es el fundador de una saga de artesanos que aún permanecen en activo en la zona levantina, donde fue prolífica su obra. Para Andalucía, además de la custodia de San Juan, labró obras tan destacadas como las coronas destinadas a las coronaciones canónicas de la Virgen del Carmen de Jerez de la Frontera (1923), emblemática por sus fastuosas dimensiones, y de la Virgen de la Fuensanta de Villanueva del Arzobispo, en Jaén (1956).
