Repite uno de los autores de chirigota más esperados del COAC: El Bizcocho.
Se presentan en escena con mucho humo y una luz violeta estos fantasmas recién llegados desde San José de la Rinconada, Sevilla. Cuando las grandes sábanas se levantan, aparecen unas especie de zombies con cadenas. En la presentación, van relatando todas las cosas a las que se dedican los fantasmas y se dirigen a Íker Jiménez, presentador de Cuarto Milenio.
En el primer pasodoble, el Bizcocho da todos los motivos por los que al final ha decidido concursar un año más en el COAC y se queja de las decisiones del jurado. El siguiente va dedicado al concurso y al resto de agrupaciones.
El pito de los cuplés es la melodía de Los Cazafantasmas. El primero hace un chiste en el que habla de los Jurado o los jurados del Carnaval… cada uno que interprete lo que quiera. El segundo trata de la situación de la Familia Real y la costumbre histórica de emparejarse entre primos.
Para el popurrí, utilizan melodías reconocibles como la de Cuando nadie me ve de Alejandro Sanz o Despechá de Rosalía y desarrollan el concepto de la propuesta.
Se marchan estos fantasmas que aprovechan fechas como Halloween para disfrazarse de vivo. Para Carnaval aún no sabemos qué disfraz escogerán, lo que sí sabemos es que el público se lo ha pasado en grande con esta chirigota.
