Los Revoleaos llegan a cuartos después del fallo del jurado. Iván Romero y Javier González ponen la música y la letra para esta comparsa. Es este último quién se encarga de la dirección.
Tras la ya habitual y tradicional introducción de Iván Romero, estos revoleaos empiezan su pase por cuartos de final. En la presentación, estos estudiantes cantan que cada vez las exigencias para entrar en el mundo laboral son mayores. Un día, se hartaron y decidieron salir de Cádiz y empezar una nueva vida fuera.
La primera letra de esta comparsa critica la actitud de muchos gaditanos que defienden la igualdad y la libertad pero que cuando llega los carnavales no permiten que nadie de fuera los disfrute. Se defiende que el Carnaval es de Cádiz pero que, desde aquí, «se hace universal». Se canta a la inclusión de todo el mundo en esta fiesta.
El segundo pasodoble empieza hablando de una persona que, tras un tiempo, se sincera. Van dando pistas hasta que nos damos cuenta de que en realidad están hablando de la salud mental. Animan a las personas que tengan problema a que vayan a terapia y los solucionen.
La tanda de cuplés se burla de las relaciones sexuales sadomasoquistas y de la publicidad del Estado en los paquetes de tabaco. «Revoleao, revoleao» es le final del estribillo que el público repite.
En el popurrí, se dan un par de consejos para llevar una vida plena y declaran que algún día volverán a la ciudad de Cádiz. En otra cuarteta, se habla de los prejuicios con los que cargan las personas jóvenes que acaban de terminar sus estudios y no tienen trabajo.
Siguiendo su camino por el Puente de La Constitución de 1812, se marchan estos comparsistas.