La abundante lluvia caída en marzo amortigua el impacto de las altas temperaturas sobre la producción
La vendimia en Málaga se ha iniciado este viernes, 29 de julio, en la Axarquía y en la zona norte de la provincia con la Moscatel de Alejandría y Moscatel Morisco, respectivamente, que suelen ser las variedades de más temprana recolección. Así, se espera una producción igual o incluso un poco superior al año pasado, pudiendo estimarse en unos 2,8 millones de kilogramos.
Las condiciones ambientales y fitosanitarias sufridas por la viña desde septiembre de 2021 hasta hoy han marcado el momento de inicio de la vendimia y gran parte de las expectativas de calidad y producción de esta campaña.
El desarrollo vegetativo del cultivo se inició con un retraso de entre una a dos semanas, pero fue compensado por las altas temperaturas sufridas desde finales de abril –superior entre dos y tres grados a los registros históricos–. En cuanto a las precipitaciones, se acumula un déficit histórico de un 26%, pero la abundante lluvia caída en marzo ha amortiguado el impacto de las altas temperaturas medias sobre la producción.
En cuanto a plagas o enfermedades, este año ha sido especialmente bueno, y no se han detectado prácticamente incidencias relevantes, pero el desarrollo de las condiciones climatológicas y sanitarias hasta finales octubre son las que finalmente van a determinar el resultado final de la cosecha 2022.
Además, la complejidad geográfica de la zona de producción, hace muy difícil la estimación sobre los resultados finales de producción y calidad de la vendimia, han indicado desde el Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Málaga y Sierras de Málaga y Pasas de Málaga.
La calidad fitosanitaria de la uva se califica en general como de muy buena, si bien es cierto que las altas temperaturas y el momento en que se han dado han provocado un cierto grado de pasificación en racimo, lo que puede influir sobre todo en la producción final, han advertido.
En este sentido, y a pesar de los factores climáticos comentados, se espera una producción igual o incluso un poco superior al año pasado, con esos 2,8 millones de kilogramos.