El parque fotovoltaico del cementerio de San Gabriel (Parcemasa), en Málaga capital, ya está operativo para inyectar a la red energía eléctrica suficiente para cubrir la mayor parte de la demanda de las dependencias y servicios del complejo funerario en horario diurno.
El alcalde, Francisco de la Torre, junto a la concejala delegada de Sostenibilidad Medioambiental y presidenta de Parcemasa, Penélope Gómez, y más miembros de la Corporación, ha asistido este lunes a la puesta en servicio del nuevo campo solar promovido por el Ayuntamiento de Málaga a través de Parcemasa.
En esta primera fase, el parque está formado por 1.052 paneles instalados en la cubierta de 38 de los 212 bloques de nichos que componen la necrópolis, lo que le convierte en la mayor planta de aprovechamiento solar de toda la red municipal. Con su entrada en servicio, ya son 58 las instalaciones fotovoltaicas en equipamientos públicos del Ayuntamiento y sus organismos, aunque el objetivo es que a final de año sean 70.
Este innovador proyecto que coloca al cementerio de San Gabriel en la vanguardia de las necrópolis del país en eficiencia y sostenibilidad fue impulsado en 2018 por Parcemasa en colaboración con el Instituto de Domótica y Eficiencia Energética de la Universidad de Málaga para conseguir una instalación sostenible.
Su ejecución ha supuesto una inversión de 782.767,54 euros (947.148,72 con IVA), de los que 156.553,51 corresponden a la aportación municipal. Los 626.214,03 euros restantes (el 80% del total) han sido cofinanciados por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020 destinado a favorecer la transición a una economía baja en carbono que ha sido gestionado por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Estas primeras 38 unidades de producción suman una potencia nominal de 573,34 kilovatios, que se destinará íntegramente a la generación de energía eléctrica en régimen de autoconsumo conectada a la red.
De esta forma, Parcemasa se garantiza energía suficiente para satisfacer la demanda de electricidad que necesita todo el complejo en horario diurno. Según la memoria del proyecto, su puesta en marcha posibilitará una disminución del consumo de energía eléctrica de un 56%, lo que en términos económicos supondrá un ahorro de más de 90.000 euros anuales en la factura de la luz. Así, el periodo de amortización de estas instalaciones por parte de Parcemasa será de aproximadamente un año y medio.
Al margen de los aspectos económicos, cabe destacar que el parque fotovoltaico contribuirá a reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera en un equivalente de 272,8 toneladas anuales. En cuanto a su diseño, se ha hecho de forma que no afecte a las concesiones de las unidades de enterramiento y sin impacto visual dado que las placas estarán siempre fijas en posición horizontal.
APUESTA POR LA FOTOVOLTAICA
Con la entrada en servicio de los paneles solares en Parcemasa, el Ayuntamiento de Málaga sigue avanzando en su apuesta por el despliegue de instalaciones fotovoltaicas para autoconsumo en dependencias y equipamientos públicos, como las que Emasa también proyecta en todas las cubiertas y en una parcela sin uso del complejo de la estación potabilizadora y desaladora de El Atabal y sobre el depósito de Teatinos.
En este compromiso con la sostenibilidad medioambiental y la eficiencia en la gestión económica se enmarca el plan municipal para la ampliación de la red de cubiertas fotovoltaicas en distintos espacios de la ciudad impulsado desde el Área de Innovación.
Actualmente, ya son 58 las plantas solares operativas y se prevé llegar a 70 a finales de este año, lo que supondrá quintuplicar la producción energética respecto a 2019 (se llegará a los 3.140 MWh frente a los 597 MWh de entonces) y permitirá una reducción de 1.805 toneladas de dióxido de carbono cada año.
Al igual que ocurre con las de Parcemasa, hay otras 16 instalaciones que se destinan al autoconsumo (Edificio 1 de Tabacalera, Módulo 4 de Tabacalera, Museo del Automóvil, Jardín Botánico Histórico la Concepción, Museo Ruso-Polo Digital, Edificio de Usos Múltiples, Módulos 1, 2, 3, 4 y 5 de Tabacalera, CEIP Adelaida de la Calle, Caja Blanca, Palacio de Ferias y Congresos y dos edificios de Promálaga: Excelencia y CityLab).
Las 41 restantes se encuentran en producción en régimen especial, es decir, se comercializa la energía obtenida ya que su instalación se realizó previamente a la entrada en vigor del Real Decreto 244/2019 que impulsó la fórmula del autoconsumo energético.