Puede pasar que si creces entre las manos artesanales de un orfebre y una costurera tu vida quede marcada más por eso que por tu propio ADN. Eso es, quizá, lo que le ocurrió a la diseñadora antequerana, María Molina. Esta semana ha estado en 101Tv y, junto a Belén Rodríguez, nos ha destapado la parte más personal de una amante de la moda que aún hoy no tiene muy claro por qué, de los muchos caminos en los que ha pensado para pasar la vida, el destino le ha puesto ese, el del diseño.
María es cercana, dulce y sobre todo muy sincera. No va de siempre lo tuve claro, al contrario. Lo suyo es más de dejarse llevar por lo que la vida le pone en el camino y luchar por lo que le dicta el corazón. Así, después de muchas vueltas a la cabeza -algo que todavía suele hacer-, su etapa de estudiante le llevó al Centro Superior de Diseño de Moda de Madrid (CSDMM), allí supo que era el camino, al menos, profesional.
«Siempre me había sentido como una persona muy creativa, pero no sabía exactamente la manera en la que poder volcar y dar rienda suelta a toda esa creatividad», cuenta durante la entrevista en KM0. Un viaje que le llevó a sus primeros pasos profesionales en varias firmas de la capital y de Málaga.
Y como María además es muy amiga de sus amigas pues llegaron los primeros diseños para esas almas cercanas. “Me decían: oye que tengo una boda, podrías hacerme el vestido”. Amigas que se pasearon por las bodas con sus diseños y que despertaron un boca a boca que terminó en su primer vestido de novia, dejar su trabajo y montar su taller, casi ná.
Recorrer sus diseños para el gran día es saber que ninguna novia igual ha vestido María desde entonces. Y han sido muchas. Tantas que su cabeza volvió a dar vueltas y, en una de esas tardes en el taller, el destino volvió a hacer de las suyas y encontró en las redes sociales -benditas en esta ocasión- un concurso para nuevos diseñadores europeos en «Shein X».
Así, se presentó, así llegó hasta las 10 seleccionadas, luego hasta las tres primeras, luego desfiló con su colección en París y hoy varias de sus prendas, hechas para la marca mundial, cuelgan el cartel de agotado en la plataforma. Pero para conocer esta otra parte del viaje y de lo que ahora da vueltas en la cabeza de María Molina -porque a pesar de lo conseguido sigue dando vueltas-, tendrás que ver la entrevista.
PD: Ah, antes de que pinches, María felicidades por lo conseguido y por el camino personal más importante que vas a vivir.