Estampida mortal en Indonesia: al menos 174 personas han muerto, entre ellas 17 niños y dos policías, y casi 200 más han resultado heridas en los altercados que se produjeron este sábado al finalizar un partido de futbol en la isla de Java. Los aficionados del equipo perdedor saltaron al terreno de juego para protestar. La policía empleó gases lacrimógenos para contenerlos, una acción que derivó en la trágico alud humana y que ha recibido duras críticas por parte del presidente del país. Esta tragedia es una de las mortales en la historia del fútbol mundial.
140 personas han fallecido en el hospital
La mayor parte de las muertes se produjo a raíz de la estampida de los aficionados. «Decenas de ellos se asfixiaron», ya que se trataba de «un espacio lleno de gente, que provocó dificultad para respirar y falta de oxígeno», ha señalado el jefe de policía de Java Oriental, Nico Afinta.
En este sentido, Afinta ha detallado que 34 personas perdieron la vida en el interior del estadio, mientras que el resto fallecieron en el hospital. Respecto a los menores fallecidos, la mayoría de ellos tenían entre 12 y 17 años, según el portavoz del Ministerio de Empoderamiento de la Mujer y Protección Infantil, Nahar. Por otro lado, otras 200 personas resultaron heridas y se encuentran bajo tratamiento médico en varios hospitales de la región, con diferentes niveles de heridas.
Investigación «exhaustiva»
Tras la tragedia, el presidente de Indonesia, Joko Widodo, expresó «sus más sentidas condolencias» a los familiares y allegados de las personas fallecidas. También anunció que ha solicitado investigación para «averiguar a fondo» los sucesos en Malang. Y no solo eso: se ha comprometido a hacer «una evaluación exhaustiva de la ejecución de los partidos de fútbol», así como de «los procedimientos de seguridad para su celebración».
«Le pedí al ministro de Salud y al gobernador de Java Oriental que supervisen los servicios médicos especiales de las víctimas que están siendo tratadas en hospitales para que tengan el mejor servicio», agregó el mandatario en un discurso televisado.
Denuncia por parte de entidades internacionales
El uso de gases lacrimógeno por la policía ha sido criticado por algunas entidades internacionales, como Amnistía Internacional, que urgió a las autoridades indonesias a llevar a cabo una «investigación rápida, exhaustiva e independiente sobre el uso de gases lacrimógenos en el estadio».
La organización enfatiza que el «gas lacrimógeno nunca debe ser disparado en espacios confinados» debido a su alto nivel de peligrosidad y recordó que las normas de seguridad de los estadios de la FIFA prohíben el transporte o el uso de los llamados «gas de control de multitudes».
«El gas lacrimógeno solo debe usarse para dispersar multitudes cuando se ha producido una violencia generalizada y cuando otros métodos hayan fallado. Se debe advertir a la gente que se usará gas lacrimógeno y permitir que se disperse», ha argumentado el director ejecutivo de Amnistía Internacional en Indonesia, Usman Hamid, en un comunicado.
Tras el «consternador» incidente, como así lo ha definido la liga de fútbol del país, se han suspendido todos los partidos durante una semana. Además, la Asociación de Fútbol (PSSI) también ha anunciado la apertura de una investigación para averiguar los hechos.