La Agencia Pública para la Gestión de la Casa Natal de Pablo Ruiz Picasso y Otros Equipamientos Museísticos y Culturales, en colaboración con Fundación ‘la Caixa’, reafirma su compromiso con el arte como herramienta de inclusión social, y en este sentido ha retomado estos pasados días 28 y 29 de mayo su iniciativa de llevar la cultura y el arte a los centros penitenciarios, en este caso al de Archidona (Málaga), para emplearlos para el desarrollo personal y emocional de los reclusos y para su proceso de reinserción.
Según destacan a través de un comunicado, este proyecto nace con el ánimo y la motivación de acercar el Museo Casa Natal Picasso y la figura del artista a aquellas personas que, de alguna forma, se encuentran en una situación de exclusión social, privadas de movilidad o de libertad.
Durante la visita, se realizaron dos sesiones de dos horas cada una, en colaboración con el Centro de Educación Permanente ‘Nelson Mandela’, ubicado dentro de la prisión de Archidona. Participaron entre 18 y 25 personas, con edades comprendidas entre los 20 y los 60 años.
En estas sesiones, los participantes pudieron dialogar sobre cómo manifestar sus emociones e ideas mediante el uso de lenguajes plásticos. Se centraron en los autorretratos de Picasso como punto de partida para sus prácticas personales y en parejas, exploraron diferentes usos de materiales artísticos con el apoyo de la música, y concluyeron con la creación de un gran mosaico grupal de una de las obras del pintor malagueño. Esta obra permanecerá expuesta en el Centro, potenciando la unión y el trabajo colaborativo.
En definitiva, se fomentó el uso de diversas técnicas enfocadas a la expresión de emociones, a través de dinámicas personales y grupales, con la música como apoyo. Se buscó el aprendizaje de herramientas artísticas con las que expresar sentimientos o ideas, en una acción sociocultural que en el entorno penitenciario tiene como pilares básicos trabajar en la motivación para un cambio personal y social.
A través de la creación artística en sus diversas modalidades, la Agencia Pública refuerza la función terapéutica del arte en distintos ámbitos. En esta ocasión, en el contexto carcelario, contribuye a canalizar, estructurar, identificar y dar forma a los sentimientos y pensamientos de los internos. De esta manera, se les ayuda a desarrollar estrategias eficaces para afrontar y superar situaciones conflictivas, favoreciendo así su crecimiento personal.