La Comisión Provincial de Patrimonio, dependiente de la Junta de Andalucía, ha dado su visto bueno «por unanimidad» al proyecto de rehabilitación del edificio ubicado en la céntrica calle Ximénez de Enciso, número 6, para que albergue cinco apartamentos turísticos. En la documentación de la Comisión, se destaca que este proyecto «no afecta negativamente a los valores propios del Bien de Interés Cultural (BIC) Hospital de los Venerables Sacerdotes de San Fernando», en cuyo entorno se ubica el inmueble.
El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1987 –el que rige según la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía de 2009 en la que se concluye que para el sector 7 el régimen urbanístico es el derivado de las «imposiciones» del PGOU de 1987–, el número 6 de Ximénez de Enciso tiene una protección urbanística nivel ‘E’ ambiental.
Esto significa que «evita la posibilidad de sustitución del inmueble por otro de nueva planta, fomentando así el mantenimiento de la trama urbana». Sin embargo, el Plan Especial del sector 7, «aunque no se aprobó definitivamente, aumentó un grado de protección, estableciendo un nivel parcial de grado 2 ‘D'». Esta calificación protege «solo» la fachada y primera crujía.
En la misma Comisión del pasado 21 de diciembre que dio el visto bueno a este proyecto turístico para el barrio de Santa Cruz, el organismo autonómico acordó, «por unanimidad de sus miembros», solicitar la «modificación» del reformado del proyecto básico y de ejecución para convertir el número 1 de la Plaza de la Contratación en apartamentos turísticos de dos llaves.
En dicha modificación, la Comisión especifica que debe proponerse «una solución alternativa a las barandillas que se colocan sobre los pretiles» y que se «subsanen las consideraciones establecidas por el informe municipal, con el fin de poder valorar adecuadamente su posible afección tanto en el entorno más inmediato como el del propio Alcázar y demás BIC situados en las proximidades, e incluso en el conjunto histórico». Por último, el nuevo documento, subraya la Comisión, «estudiará y justificará la no afección de las nuevas estructuras sobre los elementos existentes en base a los resultados arqueológicos de la actividad realizada».