Plan International, organización que trabaja por los derechos de la infancia y la igualdad de las niñas, ha alertado sobre el aumento del hambre a nivel global y de su impacto en la vida de millones de niñas y mujeres jóvenes.
Según el último ‘Informe Global sobre Crisis Alimentarias’, en 2021 cerca de 193 millones de personas se enfrentaron a la inseguridad alimentaria aguda, 1,40 millones más que en el último estudio. Asimismo, se estima que el 70 por ciento de los afectados por el hambre en el mundo son mujeres y niñas.
«La crisis climática y conflictos como el de Ucrania están teniendo consecuencias devastadoras para el hambre en el mundo, impactando de manera especialmente negativa en regiones como el Sahel o el Cuerno de África. Los estados deben prestar atención urgente al impacto que esto puede generar en la vida de las niñas, adolescentes y mujeres jóvenes y atender con urgencia y con los recursos necesarios esta crisis global que ya afecta a millones de personas», ha explicado la directora general de Plan International, Concha López.
A medida que las familias y las comunidades se ven sometidas a los impactos del hambre, las niñas y adolescentes tienen más probabilidades que los niños de dejar la escuela, y corren el riesgo de sufrir violaciones de sus derechos como el matrimonio infantil, la violencia por razón de género, la explotación sexual o los embarazos no deseados, como denuncia la ONG.
El hambre también es especialmente peligrosa para las adolescentes y mujeres embarazadas. Las complicaciones relacionadas con el embarazo y el parto son ya la principal causa de muerte de las chicas de entre 15 y 19 años a nivel global y la desnutrición aumenta el riesgo de aborto o de muerte durante el parto, añade.
Además, en algunas comunidades del Cuerno de África, el matrimonio infantil va en aumento: las familias casan a las niñas, conocidas como ‘novias de la sequía’, para aliviar la presión sobre los escasos ingresos y obtener el dinero de la dote para la comida y otros gastos.
Una niña de 13 años que vive en Somalia indicaba a Plan International que su mayor temor es que la envíen a la ciudad a trabajar o que la casen a cambio de dinero. «Cada vez que veo a un hombre hablando con mi madre, me asusto pensando que yo soy parte del trato», afirma.
PROYECTOS
La ONG cuenta con 60 proyectos en colaboración con el Programa Mundial de Alimentos en 15 países, que atienden directamente a 3,2 millones de personas. Además, tiene en marcha programas en países como Sudán del Sur, Kenia, Etiopía o Somalia para combatir la inseguridad alimentaria y garantizar el acceso al agua.
La organización también lamenta que el objetivo global de alcanzar 6.600 millones de dólares para prevenir nuevas hambrunas aún no se ha alcanzado por lo que piden a los gobiernos y a los donantes dar un paso al frente y cubrir este déficit de financiación. Del mismo modo, reclaman a los estados garantizar un acceso humanitario sin obstáculos y trabajar para construir la paz en las zonas afectadas por conflictos.