Rozalén despliega su nuevo álbum con una mezcla de estilos y una actuación llena de emoción
Rozalén, una de las voces más destacadas del pop y la canción de autor en español, llegaba a Málaga enmarcado dentro del 101 Music Festival Costa del Sol, para presentar su gira «El Abrazo» en la emblemática Plaza de Toros La Malagueta.
El concierto comenzó con el tema «Lo tengo claro», una de las nuevas canciones de su último álbum, que ya ha comenzado a resonar con fuerza entre sus seguidores. Siguieron «Sácame la pena» y «Te cuidaré de lejos», consolidando un arranque que emocionó y conectó con el público desde el primer momento.
El álbum, producido por Ismael Guijarro, muestra la versatilidad artística de Rozalén, combinando melodías pop con influencias de la música de raíz tanto nacional como latinoamericana, refleja una fusión de estilos y una profundidad emocional que se sintió intensamente en cada interpretación.
La artista no dejó de emocionar al público con cada canción. Temas como «Tres días en Cartagena» y «Todo lo que Amaste» fueron recibidos con aplausos y ovaciones, mientras que clásicos como «Girasoles» o «Vivir» levantaron y pusieron a bailar a todos los asistentes.
Una de las características más destacadas del concierto fue la inclusión. Una vez más, todos los temas fueron traducidos en directo a lengua de signos por Beatriz Romero, intérprete habitual de Rozalén, subrayando el compromiso de la artista con la accesibilidad y la inclusión.
Durante el concierto, Rozalén dedicó un momento especial para agradecer a Málaga por su significativo papel en su carrera. Recordó cómo terminó su gira «Matriz» en esta ciudad y cómo comenzó aquí su gira «El árbol y el bosque». También mencionó con cariño su primera alfombra roja en el Festival de Cine de Málaga y el emotivo momento de ganar un Goya, aunque fuera de manera telemática. La cantante también dedicó unas palabras a sus amigos malagueños: Kanka, María Peláe, y las inolvidables noches en «La Botica».
El ambiente en La Malagueta fue mágico. La iluminación, el sonido impecable y la conexión palpable entre Rozalén y sus seguidores crearon una atmósfera única, cercana y agradecida. Uno de los momentos más emocionantes de la noche fue cuando Rozalén interpretó «La Puerta Violeta». Durante esta canción, la artista bajó al público, cantando entre sus seguidores y creando un ambiente íntimo y conmovedor. La emoción alcanzó su punto álgido cuando Rozalén, visiblemente conmovida, volvía al escenario para terminar con «Todo sigue igual».
Rozalén cerró su concierto agradecida, y emocionada ante una ciudad que, como ella misma afirmó, «siempre la recibe con los brazos abiertos». Una noche para el recuerdo que dejó a todos los presentes con el corazón lleno de música, emociones y abrazos.