La vicepresidenta segunda de la Diputación de Málaga, Natacha Rivas, ha recogido la distinción con la que el municipio de Sedella reconoce la labor de la institución provincial durante la pandemia de la COVID. Este acto ha tenido lugar durante la celebración de la octava edición del Día de la Trilla, en el que se realiza un homenaje a esta tarea agrícola de la que aún quedan vestigios.
Rivas ha agradecido el gesto del municipio, ha felicitado al resto de premiados, y ha asegurado que el apoyo a los municipios pequeños y medianos es «una de las señas de identidad del equipo de gobierno».
La vicepresidenta segunda, acompañada por el alcalde de Sedella, Francisco Abolafio, ha recordado que la Diputación transfirió 133 millones de euros a los municipios malagueños el año pasado, «una cifra récord en la historia de esta institución», y que la mayor parte de ese dinero se puso en manos de los ayuntamientos de forma incondicionada, es decir, «para que los alcaldes pudieran disponer de esos fondos y destinarlos a lo que considerasen más necesario».
Por último, Rivas ha destacado que el Día de la Trilla de Sedella es una fiesta en la que se recuperan estos antiguos usos que los agricultores tenían para separar el grano de la paja y ha apuntado que esta celebración permite disfrutar de la música, el arte, la historia, las tradiciones y la gastronomía de este pueblo axárquico.
