Los sindicatos UGT-A, CSIF-A y Satse –este último de enfermería– han valorado este jueves el «talante dialogante» mostrado por el ya presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, durante los últimos tres años y medio en los que ostentó el cargo de consejero de Salud y Familias. Un periodo «muy complicado», atravesado por la pandemia de coronavirus, en el que no obstante «se podría haber realizado una mejor gestión en materia de recursos humanos», una tarea pendiente que esperan acometa su sucesor en el cargo para los próximos cuatro años.
Los sindicatos han reaccionado en declaraciones a Europa Press coincidiendo con la asunción oficial de Aguirre de su nuevo cargo en la cámara andaluza, en la que ha echado a andar este jueves la duodécima legislatura, por primera vez en la historia de la autonomía presidida por alguien del PP-A. Detrás quedan tres años y medio en los que fue consejero de Salud, al frente de crisis como la del coronavirus.
De aquella etapa UGT guarda tareas pendientes que espera que ahora recoja quien sea elegido como sucesor. «Tenemos las expectativas puestas en un consejero que sepa reconocer la labor que realiza el colectivo que trabaja en nuestras instituciones sanitarias», ha sostenido el secretario del Sector de Salud, Servicios Sociosanitarios y Dependencia de la Federación de Empleados de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT-A, Antonio Macías.
En concreto, Macías ha dicho esperar que el nuevo consejero o consejera «apueste firmemente por la consolidación de ese colectivo, incluidos los 12.000 eventuales que ahora mismo están en el aire, que finalizan sus contratos en diciembre». También confían en que se reconozca a «esos miles y miles de trabajadores que se han dejado la vida por cuidarnos durante la pandemia».
«Ha llegado el momento de reconocer esa valía en forma de mejores condiciones laborales y retributivas», ha considerado.
Mientras, desde CSIF se ha valorado de Aguirre «su cercanía y afabilidad, así como su talante dialogante». «Este periodo ha sido muy complicado, con una crisis sanitaria que gestionar como la de la pandemia de la Covid-19 desde una realidad de la sanidad pública de falta de inversiones y gestión cicatera que se había prolongado durante años», ha comentado el sindicato.
Con todo, ha advertido que «no se puede decir que la Administración haya puesto todos los mecanismos a su alcance y toda la carne en el asador para que los profesionales de la sanidad pública hayan salido fortalecidos». «Muy al contrario, muchos profesionales se nos han ido a sitios donde les ofrecían condiciones mejores y nos encontramos ante un déficit de personal notorio, que irá a más con las jubilaciones previstas en los próximos años», ha avisado.
Como aspecto positivo, CSIF-A ha destacado el acuerdo alcanzado para el desarrollo de la carrera profesional para todas las categorías del SAS, «una reivindicación histórica que por fin se saca adelante», en tanto que ha pedido a su sucesor «capacidad de diálogo, empatía, solvencia en la gestión y una apuesta firme por la sanidad pública».
De otro lado, la secretaria de Acción Sindical de Satse Andalucía, Rosa Elena García, ha asegurado que la gestión del consejero de Salud y Familias «ha estado condicionada por la peor crisis sanitaria y es difícil valorar si podría haber sido de otra manera», apostillando que «todos tenemos luces y sombras».
En este sentido, ha señalado que la pandemia «ha puesto de manifiesto el déficit existente en la sanidad». «Se podría haber realizado una mejor gestión en materia de recursos humanos, con aumento de la plantilla con contratos estructurales en lugar de precarios».
Asimismo, García ha puesto de relieve que «faltan más de 34.000 enfermeros en Andalucía para estar en la media europea», añadiendo que la región «ha batido el récord de derivaciones a la sanidad privada y en aumento de conciertos». «Son materias que quedan pendientes para el nuevo consejero, estaremos vigilantes ante cualquier tentativa de privatización de la sanidad», ha apostillado.
«Esperamos que el nuevo consejero haga una gran labor en su nueva etapa», ha subrayado la dirigente sindical, concluyendo que «le pedimos diálogo y colaboración ante cualquier medida que pueda ser positiva para la sanidad pública y el desarrollo profesional de las enfermeras y fisioterapeutas en particular».
