Un informe de un experto incorporado al proyecto de candidatura al Patrimonio Mundial del conjunto arqueológico de Itálica, enclavado en Santiponce y donde descansan las ruinas de la antigua ciudad romana cuna del emperador Trajano y patria de la familia de Adriano; recomienda no presentar dicha candidatura al diferir de su «enfoque arqueológico»; pues el papel de dicho enclave en la arquitectura y el urbanismo en la etapa del emperador Adriano no sería «razón suficiente para demostrar el valor universal excepcional, pues muchos de los sitios romanos declarados Patrimonio Mundial también contemplan este período» y el «comparativo de exclusividad» no sería «suficientemente significativo». Experto Patrimonio Itálica
Un informe sobre la candidatura de Itálica no apoya el «enfoque arqueológico» y avisa de «debilidades»
La propuesta de candidatura de Itálica a la declaración de Patrimonio Mundial nació en 2014 de la mano de la Fundación Itálica de Estudios Clásicos y se fundamentaba especialmente en el papel de este asentamiento como «ensayo» del proyecto político de la antigua Roma, al tratarse de la primera ciudad creada por Roma fuera de la Península Itálica, siendo además «la cuna de los emperadores Trajano y Adriano».
Tras ser frenada durante un tiempo, la candidatura fue recuperada y en junio de 2017, la asociación ciudadana Civisur formalizaba el lanzamiento oficial de la candidatura, bautizada como ‘Itálica, una ciudad adrianea’, para esgrimir cómo el enclave refleja la arquitectura y el urbanismo promovidos durante la etapa del emperador Adriano (117-138), cuya familia tuvo origen en dicha ciudad. Adriano, además, concedió el rango de colonia a la ciudad y promovió la ampliación urbanística que constituye el actual recinto arqueológico visitable. NOTICIAS SEVILLA
Ya en 2018, el Consejo Nacional de Patrimonio Histórico de España acordaba incluir a Itálica en su lista indicativa de monumentos susceptibles de ser elevados a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), para que opten a la declaración de Patrimonio de la Humanidad.
EL FORMULARIO DE INSCRIPCIÓN
En 2022 fue entregado a la Dirección General de Bellas Artes el expediente de defensa de la candidatura o formulario de inscripción, un documento de 481 páginas y 477 fotografías y planos.
Tras la entrega de dicho documento, correspondía que un experto externo al Ministerio de Cultura evaluase el mismo; toda vez que debe ser el Consejo de Patrimonio Histórico del Ministerio de Cultura, órgano de colaboración en esta materia entre la Administración del Estado y las comunidades autónomas, el organismo que adopte la decisión sobre si elevar o no la candidatura de Itálica al Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco. Experto Patrimonio Itálica
En ese sentido, hace pocas semanas, Civisur traspasaba el proyecto de candidatura a la Junta de Andalucía como propietaria del enclave y responsable de la gestión del mismo, ante lo cual la Consejería de Turismo y Cultura manifestaba su respaldo a la iniciativa y anunciaba que un equipo propio de expertos en Patrimonio Mundial redactará un nuevo formulario de la candidatura, adaptándolo a la exigencias actuales de la Unesco, antes de que se presente de nuevo al Ministerio de Cultura y Deporte para su valoración y elevación la Consejo de Patrimonio Histórico.
En este marco, en el expediente correspondiente al citado proyecto de candidatura de este recinto arqueológico al Patrimonio Mundial figura un informe de un experto, que destaca que el proyecto «demuestra un gran trabajo y equipo humano detrás» y «está muy bien desarrollado en su parte jurídico-administrativa, científica arqueológica y de conservación, mostrando sus mayores debilidades en los valores especiales, la redacción del nuevo plan director y en la carencia de plan de financiación».
EL «DURO TRABAJO» DEL CONSEJO ASESOR
El documento en cuestión reconoce el «duro trabajo documental» desarrollado a la hora de configurar la candidatura, impulsada hasta ahora por un consejo asesor presidido por la copresidenta de Civisur, Concha Cobreros; y en el que figuraban personalidades como la catedrática emérita de Arqueología de la Hispalense Pilar León o los arqueólogos y exdirectores del conjunto arqueológico de Itálica José Manuel Rodríguez Hidalgo y Fernando Amores.
La candidatura, según este experto, está «muy bien argumentada en protección y conservación», pero respecto al plan de gestión cuya elaboración corresponde a la Junta de Andalucía como propietaria y gestora del enclave, se trata de un documento «inexistente en este momento» y que «sólo está esbozado en directrices y estrategia general».
El informe urge además a «la actualización legal del plan director» que releve al de 2010, hecho que «podría compensar y justificar en parte la carencia de éste otro plan» de gestión; avisando respecto al plan director que «no parece suficiente con la justificación de poder seguir usando el vigente hasta su actualización».
Igualmente, el informe expone que la relación de puestos de trabajo (RPT) del conjunto arqueológico de Itálica «también es muy débil y claramente necesita más perfiles técnicos que aunque requeridos, deberían estar comprometidos o ser existentes ya para asegurar la sostenibilidad del bien a largo plazo». «Sin duda, es de alabar el trabajo del personal existente en este momento, pues tiene mucho mérito teniendo en cuenta que responde a la mitad de la plantilla estimada como necesaria», indica este experto.
El informe agrega que la autenticidad o integridad del yacimiento está «muy bien argumentada y sobradamente justificada», pues «es un sitio afortunado y protegido desde muy pronto, antes de la agresividad constructiva del siglo XX», lo que «ha permitido una buena conservación de valores en general, asumiendo inevitablemente los destrozos vinculados a la cercanía al enclave urbano actual de Santiponce».
LAS «DEBILIDADES»
Pero este experto avisa de que el análisis comparativo «es una de las mayores debilidades de la candidatura», por aspectos como que «se argumenta su excepcionalidad en base a un corto periodo cronológico, entendiendo esto como su gran diferencia y aportación frente al resto de sitios representativos del período romano de la lista, incluidos algunos de los declarados en España», pero «la realidad es que a efectos de una declaración de este tipo su aportación a la ciencia arqueológica como algo individualizado es poco consistente e incluso podría decirse que algo contradictoria con la tipología de bien».
En ese sentido, el informe no recomienda la presentación de la candidatura ante la Unesco «por la estrategia global y por el enfoque arqueológico de la justificación, contrario a los principios básicos de esta ciencia donde el contexto resulta clave más allá de unos años cronológicos específicos»; pues «muchos de los sitios romanos declarados Patrimonio Mundial también contemplan este período (el de Adriano) en sus candidaturas, aunque no sea el único que los justifica».
«Por tanto, el comparativo de exclusividad en cuanto a la época sobre un espacio físico no parece que sea suficientemente significativo, sólo por estar mejor representado que en otros», explica este experto, argumentando que «la ciudad no se abandona justo el día que muere un emperador o que cambia el gobierno de una ciudad, sino que la vida sigue en los sitios y esa otra vida no ha sido menos importante para mantener esta materialidad hasta hoy».
«Un sitio arqueológico hoy día debería justificarse en la interpretación de la materialidad hasta hoy», avisa este informe, explicando que «es probable que un expediente de este calibre se justificara en el momento que se presentó a lista indicativa (en 2018), pero la deriva de la historia de las declaraciones (a Patrimonio Mundial) y la gran cantidad de sitios arqueológicos de índole romana dificultan hacer viable esta apuesta».