El último curso de la legislatura ha arrancado. Y lo hace con la cuesta de septiembre a la vuelta de la esquina. Una ‘vuelta de las vacaciones’ marcada por la alta inflación. Ante esto, los sindicatos claman por una subida salarial a la que se opone la patronal empresarial. La amenaza de un otoño caliente de movilizaciones se abre camino. Una ofensiva en la que cuentan con el apoyo del Gobierno. En concreto, de Yolanda Díaz.
“Le pediría a la CEOE que se comprometa con su país”. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social ha enviado este mensaje a los empresarios desde los pasillos del Congreso antes de dejar claro su “apoyo explícito a las movilizaciones sindicales frente a la patronal española”.
Según ha afirmado en declaraciones a los medios, “creo que (Antonio) Garamendi sabe muy bien lo que está pasando en el país y bloquear la negociación de los convenios colectivos hoy no es una buena receta”. Para la vicepresidenta los trabajadores y trabajadoras de España deben de dejar de perder poder adquisitivo por el impacto de la inflación.
“Le pido a Garamendi compromiso con el país y apoyo explícito a movilizaciones de sindicatos”, ha remarcado. La pelota, por tanto, está ahora en el tejado de la CEOE.
Previamente, Díaz ha asegurado que a partir de septiembre el Gobierno de coalición subirá el salario mínimo. “Lo vamos a hacer más que nunca porque estamos en un momento de absoluta excepcionalidad política”, ha señalado. En concreto, apunta a un incremento superior al 60% del sueldo medio. Algo que defenderá el Ejecutivo en la reunión de la comisión de expertos del próximo día 2 de septiembre. Y es que, la situación “es de máxima incertidumbre”.
“Lo que es evidente es que tenemos que ser conscientes de la situación que estamos viviendo”, ha incidido Yolanda Díaz, quien ha recordado que el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores fija que se revalorice el salario mínimo de acuerdo a varios criterios, entre los que está la inflación.